Cuando llegas a lo tuyo
Cuando llegas
Pepe Raya
Si dijéramos lo que pensamos unos de otros nos estaríamos matando vivos. En efecto, hay algo que se conoce como buenos modales, educación o ser políticamente correcto. Hay gente que se pasa toda la vida callando por no molestar a su pareja, amigo o vecino. Callarse puede ser una opción, pero no la opción. Cuando notes que tienes algo dentro que puede reventar, escúpelo, ya que muchas veces lo que se queda dentro se pudre. La mejor licencia que te otorga llegar a cierta edad es que puedes mandar a la mierda a quien sea con total libertad y sin remordimientos. No ya por lo del convento y cagarse dentro y todo eso, sino porque ya está bien de poner la otra mejilla o de mirar hacia otro lado. Hay quien opta por fingir, sonreír y abrazar, como los políticos. Cuando aprecio un corazón puro, sano y sin malicia la sonrisa emerge con total naturalidad y el abrazo fluye. Incluso con desconocidos. Ya me he convertido en un perro. Huelo a la buena y a la mala gente. El rencor, la soberbia, el desdén, la manipulación y la dominación son la marca de agua de muchas personas. Si no consiguen lo que quieren, si no te acercan a su círculo y te conviertes en su siervo, puede caer sobre ti las diez plagas de Egipto. O estás conmigo o contra mí. La equidistancia y el pensamiento crítico pueden ser tus peores aliados si quieres sobrevivir en el mundo de la política o sencillamente en tu entorno. Hay gente que no soporta escuchar la verdad: lo que no quieren oír: lo que hiere su amor propio: lo que deja en evidencia su autoestima y sus errores. La opción más sencilla sería distanciarse. ¿Pero qué tienes que perder si al mismo tiempo le cantas las cuarenta? Rodéate de gente sincera, empática, transparente, esa buena gente que se le ve venir y no va con medias tintas, que un día te pone una cara y otro día otra; esos que te van dando una de cal y otra de arena. Recuerda que siempre primará la calidad y no la cantidad. Más vale pocos y buenos. Cuando llegas a cierta edad, lo más seguro es que ya no te dejes manipular como antes.
Lo tuyo
Pepe raya
Los discursos de odio y el odio de los discursos. O te polarizas o estás perdido. Existen dos bandas de agresores e insultos indiscriminados. O estás conmigo o contra mí. Cualquier pensamiento discordante puede ser motivo de brutal agresión. Imposible quedarse en medio porque recibes trompazos de ambos lados. Es cierto y es un hecho que gracias a la corva existen los principales derechos sociales. Poco a poco, una parte de la enhiesta, la más moderada, se los ha ido apropiando o adoptando. Ahora todos los subvertidos se casan, aunque sean casi de extrema derecha. Aceptar derechos sociales e igualitarios es un síntoma de avance. Pero también los del bando izquierdo caen en situaciones incongruentes en la sociedad europea como en el tema de la propiedad privada y la equidad entre todos los territorios del país y de la ciudadanía. Luego, existen otras incongruencias comunes como la absolución de sus propios defraudadores o ladrones. Tal es la polarización que justifican a los de su bando sacando los trapos sucios pasados del contrario. Es como si intentaras avanzar en un lodazal que te cubre hasta las rodillas. Y te apena tu país porque podríamos estar mucho mejor de lo que estamos. Porque el odio nos paraliza como en 1936 y preferimos ahogarnos antes de dar nuestro brazo a torcer. Y seguimos viendo la paja en el ojo ajeno. Y la justicia se posterga. Y los ciudadanos se la toman por su cuenta porque la auténtica no responde. Y entre todos se cubren y se tapan. Son incapaces de señalar a los culpables para que no paguen justos por pecadores. Y se repiten las mismas consignas de París. Las generaciones mestizas o las enraizadas se sienten desarraigadas porque siempre hay energúmenos que encienden la mecha de la violencia. No se pueden ir de rositas, ni los unos ni los otros; pero aquí se va hasta el rey o los ministros aquellos y estos. La verdad no existe, sino la inventada. La que tú quieres escuchar. Y te revuelves contra la otra injusticia pero no contra la tuya propia. Y sigues ahí, esperando a que hagan las cosas por ti. Esperando a que llegue un nuevo día y nos despellejemos vivos para luego decir: ¡Ya lo decía yo!
Los porqués
Pepe
Raya
Llevo un tiempo recibiendo guantazos por no querer
polarizarme. Entre mis contactos y amistades reina la diversidad. Un servidor
se puede sentar a la mesa tanto con Pablo o Federico a platicar, sin necesidad
de irritarme. De hecho, voy informándome, desinformándome y escuchando a los
locutores de todas las cadenas de radio y TV, pública o privada. La diversidad
consiste en incluir incluso a los que la niegan. El mejor ejemplo de democracia
consiste en integrar a los que la niegan o la han negado. El pasado también
cuenta, pero no es lo único que cuenta. Triturar incoherencias es mi principal
habilidad, pese a quien pese; aunque algunos vivan de ello o sean incongruentemente
consecuentes. Incluyo también al borreguismo, esto es, los que cambian de
opinión según vaya dictando su líder o lideresa, si bien esto mismo también
forma parte de esa diversidad. Si uno se despoja del corsé, más o menos
estrecho que te impone tu ideología, podrás arribar al país de la congruencia,
donde todo tiene sentido porque reina el sentido común. La llamada lluvia de
ideas podría sustituirse por la lluvia de interrogantes: ¿Por qué no se agiliza
la integración de los inmigrantes si ello contribuye al desarrollo de nuestra
economía? ¿Por qué no se agiliza el desalojo de los okupas? ¿Por qué hay tantos
países contrarios a la agenda 2030 si ello va a contribuir a que vivan nuestros
hijos o nietos en un mundo mejor? ¿Por qué algunos países combaten el
terrorismo con terrorismo? ¿Por qué no se castiga a los corruptos con penas
mucho más duras? Y que devuelvan el dinero. ¿Por qué no se hace un referéndum
nacional sobre la independencia de algunas autonomías? ¿Por qué creen que
guardando un minuto de silencio la violencia de género va a disminuir? Los
políticos se pierden entre tanto protocolo. ¿Por qué se mofan tanto de una
determinada religión y a la otra ni la nombran? ¿Por qué se considera que
trabajar en una sauna gay es algo indecente? ¿Por qué no se acepta que las
corridas de toros también es maltrato animal? ¿Por qué algunos inmigrantes no
se integran y son tan conflictivos? ¿Por qué algunos españoles son tan
xenófobos? ¿Por qué no se construye más vivienda social? ¿Por qué presumimos de
ser tan ignorantes? ¿Por qué nos cuesta tanto ser un país serio?






Tuve bastante con asomar la cabeza a la política local para darme cuenta que no existe la opinión propia.por ejemplo,si la organización decía que la nieve era blanca había que verla negra como el chapapote ....ejemplo
ResponderEliminarYo,me identifique con Fernando Fernan Gómez y...los mandé a la mierda.Otras veces con Umbral y decía:he venido a hablar de mi libro,me siento utilizado y... me VoY
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